Víctimas de Uruguay

Sergio Rubén López Burgos

Descripción del caso

Trataremos ahora lo que le ocurrió a Sergio Rubén López Burgos quien, como vimos recién, fue secuestrado junto a León Duarte.

También de nacionalidad uruguaya, López Burgos fue, en su país de origen, dirigente sindical del gremio de PHUASA y miembro de la Resistencia Obrera Estudiantil.

A raíz de la persecución que sufría en su país migró a la Argentina en abril de 1975. Aquí, participó de la fundación del Partido por la Victoria del Pueblo, espacio político que integró en adelante.

Como ya señalamos, Sergio Rubén López Burgos y León Duarte fueron secuestrados el 13 de julio de 1976, alrededor de las 9 de la noche, del interior de un bar ubicado en la intersección de las calles Boedo y Carlos Calvo, en la Ciudad de Buenos Aires por un grupo de entre diez y doce personas vestidas de civil mediante el empleo de armas de fuego. El grupo, reiteramos, estaba integrado por agentes uruguayos pertenecientes al equipo a cargo de José Nino Gavazzo, entre quienes se encontraba el imputado Manuel Juan Cordero Piacentini, y miembros de la OT 18 de la SIDE, entre ellos, Aníbal Gordon y Raúl Antonio Guglielminetti. Al resistirse López Brugos fue brutalmente golpeado por Cordero Piacentini, lo que le provocó una fractura en la mandíbula.

Como vimos, ambos fueron trasladados a “Automotores Orletti”. Allí López Burgos fue brutalmente torturado y permaneció recluido en condiciones inhumanas. Permaneció en ese lugar hasta el 24 de julio de 1976, fecha en fue introducido en un avión, junto a otros cautivos del centro clandestino y llevado a la República Oriental del Uruguay en un vuelo clandestino y masivo, coordinado por fuerzas represivas argentino/uruguayas.

Como ya señaláramos anteriormente, el lugar donde López Burgos y Duarte fueron secuestrados, se encontraba dentro del área militar V a cargo del Jefe del Grupo de Artillería de Defensa Aérea 101, en ese momento Jorge Alberto Muzzio, el cual dependía del Comandante de la Subzona Capital Federal, en ese momento, el recientemente fallecido Jorge Carlos Olivera Róvere.

 

Prueba

Estos hechos se encuentran acreditados a partir de distintos elementos de prueba producidos o incorporados durante el debate, que se detallan a continuación.           

En primer lugar a partir del testimonio de Sergio López Burgos brindado en el juicio de la causa n° 1627, incorporado al debate. Previo a narrar los hechos que lo tuvieron como víctima se refirió a vivencias anteriores que echan luz acerca de la persecución sufrida por él y sus compañeros en aquella época y la coordinación represiva existente entre Uruguay y la Argentina.

Recordó un episodio ocurrido en el mes de febrero de 1976, en el que fue interrogado por cuatro personas en la sede del Diario “La opinión”.

Explicó que en esa ocasión logró no ser detenido porque intercedieron Jacobo Timmerman y Zelmar Michelini. Posteriormente identificaría a Osvaldo Forese y otros dos militares uruguayos como tres de los que integraran ese grupo.

Narró, asimismo, otro episodio, ocurrido el día 9 de junio de 1976, en el que logró escapar de dos policías que lo seguían cuando se dirigía a visitar a Washington Pérez Rossini.

Respecto a la circunstancias en que ocurrió su secuestro, López Brugos contó que se encontraba con León Duarte en un bar ubicado en Carlos Calvo y Boedo, el 13 de julio de 1976, cuando ingresó un grupo de personas vestidas de civil y que los apuntaron con armas de fuego. Nos contó que fue Duarte quien primero reconoció a Cordero Piacentini en ese grupo, y que luego pudo determinar que también estaban Aníbal Gordon y Raúl Antonio Guglielmineti. También dijo que fue golpeado por Cordero Piacentini cuando intentó resistirse y que como consecuencia de los golpes recibidos sufrió una fractura del maxilar, lesión no atendida que lo acompañaría durante su cautiverio.

Describió también el trayecto y el ingreso a Automotores Orletti, las condiciones en las que permaneció allí recluido y las sesiones de torturas a las que fue sometido. Al describir los tormentos, explicó que en la planta alta de Automotores Orletti lo desnudaron, lo colgaron de un gancho y le colocaron varios cables en la cintura. El piso del lugar estaba mojado y habían esparcido sal gruesa. En esas condiciones fue interrogado por el militar uruguayo Manuel Juan Cordero Piacentini mientras se le pasaba corriente eléctrica, hasta que se desvaneció.

Al despertar, notó que se encontraba tirado en el piso. Desde allí observó cómo Cordero Piacentini abusaba sexualmente de su compañera de militancia Ana Inés Quadros Herrera, quien se encontraba encapuchada y tendida sobre una mesa.

Contó que luego de forzarlo a que se identificara, le exhibieron un organigrama de la estructura del PVP donde pudo leer los nombres de sus compañeros. La intención de los represores era que él llenara los espacios vacíos con los nombres de los compañeros que no estaban todavía allí.

Pasado un tiempo volvieron a torturarlo, regresándolo luego a la planta baja del recinto, permaneciendo en ese lugar hasta el final de su cautiverio.

Respecto de las condiciones inhumanas de detención refirió que solo comió dos veces, que siempre durmió semidesnudo sobre el suelo y al baño no pudo ir en ningún momento.

También relató los detalles del traslado a Uruguay, ocurrido el 24 de julio de 1976, y su cautiverio en Uruguay, primero en el CCD de “Punta Gorda” y posteriormente en las instalaciones del SID, en la intersección de Boulevard Artigas y Palmar, en la Ciudad de Montevideo.

Finalmente, fue procesado por la Justicia Militar Uruguaya, y alojado en un instituto penal donde permaneció hasta 1981.

Respecto del cautiverio de Sergio Rubén López Burgos en “Automotores Orletti” contamos también con las declaraciones de Sara Rita Méndez, Ana Inés Quadros, Eduardo Deán Bermúdez, Margarita Michellini Delle Piane, Raul Altuna Facal, Edelweiss Zahn, María Elba Rama Molla, Ariel Rogelio Soto Loureiro, Alicia Raquel Cadenas Ravela, Ana María Salvo Sánchez, Gastón Zina Figueredo, Víctor Hugo Lubián Peláez y Marta Petrides, María Mónica Soliño Platero, Jorge Raul Gonzalez Cardozo, Enrique Rodríguez Larreta Martínez, Raquel Nogueira Pauillier, Jose Feliz Díaz, Laura Anzalone y Cecilia Irene Gayoso, brindadas en el debate de la causa n° 1627 e incorporadas a este juicio.

Sumado a esto, contamos con el testimonio de Ricardo Gil Iribarne, quien refirió que mientras se encontraba recluido en el Penal de Libertad compartió cautiverio con algunos militantes del PVP secuestrados en la Argentina, entre los que recordó a Sergio López Burgos, quien presentaba una lesión en la mandíbula.

El plexo probatorio del presente caso se ve reforzado por diversa prueba documental.

En primer término contamos con la documentación aportada por Sergio Rubén López Burgos junto con el pedido para ser tenido por parte querellante, agregada a fs. 1548/1610 de la causa n° 1976.

Entre ella debemos destacar la que da cuenta del relato que efectuó en el año 1984 en la ciudad de Viena, mientras todavía se encontraba en el exilio. En aquella oportunidad el nombrado realizó una descripción pormenorizada de los sucesos que le acontecieron durante su cautiverio y que coincide con el relato plasmado en su declaración incorporada al debate. Documento 1.

Asimismo, también resultan relevantes las constancias de la causa nº 39.526 vinculada con una acción de habeas corpus interpuesta el 23 de julio de 1976 en favor de Sergio Rubén López Burgos, del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal Nº 3, que denotan la preocupación de sus familiares para dar con su paradero.

Por otra parte, de la documentación del NSA y su correspondiente traducción, deben ser destacados dos registros informáticos. En primer lugar, el identificado como 0000a11f. Se trata de un informe de la embajada estadounidense en Montevideo al departamento de estado de ese país, que da cuenta de que el gobierno militar uruguayo anunció la detención de 62 subversivos, quienes pertenecían al PVP, entre los que se encontraba el nombrado. En segundo lugar, el identificado como el 0000A7C2 , ya referenciado en otros casos, que es un documento entregado a la embajada de EEUU por la ACNUR y contiene una lista de nombres de uruguayos desaparecidos en Buenos Aires en 1976 y luego reaparecidos en su país de origen. Allí también surge el nombre de Sergio López Burgos. Documento 2 y Documento 3.

Finalmente, no puede dejar de señalarse que en el debate celebrado en el marco de la causa conocida como Automotores Orletti, este mismo Tribunal dio por probado el secuestro de Sergio Rubén López Burgos, en las circunstancias de modo tiempo y lugar aquí descriptas, así como su cautiverio en el centro clandestino de detención conocido como Automotores Orletti, y los tormentos a los que fue sometido en ese lugar. Para llegar a esa conclusión se valoraron tanto los testimonios a los que hicimos referencia como la prueba documental mencionada. Por esos hechos entre otros fueron condenados Raúl Antonio Guglielmineti, Honorio Martínez Ruíz y Eduardo Alfredo Rufo, condena que ha quedado firme.

Por la privación ilegítima de la libertad y las torturas de Sergio Rubén López Burgos formulamos acusación contra Miguel Ángel Furci.

Lo que le ocurrió a López Burgos es otra prueba de la coordinación regional ejecutada en el marco de la denominada “Operación Cóndor”.