El 8 de Julio la cotitular de PROTEX, Alejandra Mángano, expuso como experta invitada por la UNODC (United Nations Office on Drugs and Crimes) en la reunión convocada para debatir el reciente documento publicado acerca del impacto que tuvo el COVID-19 en la Trata de Personas ”The effects of the COVID-19 pandemic on trafficking in persons and responses to the challenges”.

En el marco de su experiencia como Fiscal de Protex y coordinadora de la REDTRAM (Red Iberoamericana de Fiscales Especializados contra la Trata de Personas y el Tráfico de Migrantes) Mángano señaló, entre otras cosas, la adaptación y el cambio que las redes criminales sufrieron a raíz de la pandemia, hizo énfasis en la infiltración de estos grupos en las redes sociales tanto como para captar a nuevas víctimas como para contactar a posibles clientes y mencionó el incremento de la explotación a menores de edad, como resultado de las restricciones a la presencialidad escolar, convirtiéndose esta población en un grupo aún más vulnerable, propenso a ser explotado tanto sexual como laboralmente.

Por otra parte, resaltó, que a raíz de una investigación de REDTRAM se identificó los desafíos que se presentaron a la hora de identificar a las víctimas, ya que las medidas de aislamiento llevaron a que el crimen opere en un contexto aún más privado. En ese sentido, también se hizo mención a la mayor dificultad que se les presentó a las víctimas al querer escapar de la explotación debido al miedo de ser detenidas por las autoridades a causa de las restricciones para viajar largas distancias durante la pandemia. Para finalizar reflexionó acerca de la importancia de que los operadores judiciales se adapten a los cambios en la modalidad identificados a raíz de la pandemia, con el uso de redes sociales, internet, y whatsapp entre otros,  para poder dar una respuesta más eficaz a las situaciones de trata y explotación de personas.