Derechos de la persona imputada

Toda persona a la que le atribuya la comisión de un delito debe contar con las garantías necesarias para ejercer su defensa.

Entre sus derechos, se hallan los siguientes:

A ser informada de las razones de su aprehensión o detención de manera detallada.

A solicitar que su situación sea comunicada en forma de inmediata a un pariente o persona de su confianza, asociación o entidad.

A guardar silencio, sin que ello pueda ser valorado como una admisión de los hechos o como indicio de culpabilidad.

A ser asistido desde el primer acto del procedimiento por un defensor de su elección, y a tener entrevistas con él en forma libre, privada y confidencial.

A acceder a toda la información disponible desde el momento en que se tenga noticia de la existencia del proceso.