Se trata de “Manual de Investigación Policial – Tomos I y II”, publicados por Librería Cívica en 2023/24.
Extracto del prólogo a cargo de José Manuel García Porta:
“Su lectura, nos lleva al complicado escenario de la seguridad pública, con conflictos de poderes entre los dos subsistemas en los que se apoya, que son la Justicia y la Policía. El incremento del delito, en todas sus manifestaciones, desde el delincuente solitario, hasta el delito organizado en bandas o asociaciones mafiosas, aparece la relación delito-crisis del Estado, el fenómeno de la seguridad interior y su correlato en la búsqueda de la autonomía en la política de seguridad. El tema central de la obra radica en uno de los sub sistemas de la lucha contra el delito, que es precisamente la Institución Policial, en sus encomiables funciones de prevención e investigación de los delitos, y que en nada se superponen una con otra. Sobre la función de investigación resulta imperioso resaltar que nuestra ley procesal actual, faculta a los funcionarios policiales a iniciar per se, la investigación de aquellos delitos consumados y/o en vías de ejecución, como así también proceder al secuestro de armas de fuego y demás elementos utilizados para cometerlos, con conocimiento del Fiscal (cfr. Cap. III- Actos de la Policía, art. 268 del C.P.P.S.F.), resultando ambos funcionarios -Policía y Fiscal- operadores necesarios en la Investigación Penal Preparatoria. Sin embargo, por diversas razones, tal vez restrictivas, y sin apoyo normativo, las más de las veces, los integrantes del cuerpo policial se ven restringidos en sus facultades a iniciar investigaciones de oficio, que llegan a su conocimiento, en razón de su función básica y primordial que es la prevención. En tal sentido, no se puede desconocer que la autoridad prevencional, por su función específica, monta su escenario laboral en la calle, resultando por tanto únicos conocedores de la inseguridad callejera, la que preocupa y azota a la sociedad toda. Tampoco puede escapar al sentido común, que la situación de crisis generalizada actual, en los planos institucional, económico, social y cultural por el que se encuentra atravesando nuestro país, se vuelve terreno fértil para el crecimiento desmesurado de la delincuencia, con hechos delictivos cometidos con una virulencia que no reconoce antecedentes, muchas veces perpetrados por organizaciones mafiosas con una estructura nunca antes pensada, lo que torna imprescindible dotar a las fuerzas policiales de recursos materiales y humanos para la lucha contra el delito común y en especial contra el crimen organizado.”
Puede consultar la obra bajo el número topográfico E 1730/31 – 363.25 MIC t. 1/2